[Rajini Vaidyanathan] Hola a todos y bienvenidos a las Reuniones Anuales de 2024 del Grupo Banco Mundial y el FMI. Bienvenidos a todos, me llamo Rajini Vaidyanathan. En los próximos 90 minutos vamos a responder a la pregunta: ¿Cómo pueden los alimentos y la agricultura servir como un motor de crecimiento sostenible y creación de empleo? Vamos a examinar el potencial del sistema alimentario mundial para ver cómo pueden fomentar el crecimiento económico, crear los empleos del mañana, pero también paliar los efectos del cambio climático. Pueden participar en línea con la etiqueta #WBGMeetings. Los expertos estarán respondiendo a sus preguntas en línea en distintos idiomas, en envivo.bancomundial.org. Si nos siguen en línea, pueden también hacer preguntas por el chat. Si están en persona pueden utilizar el código QR disponible en sala. Durante el evento vamos a estar escuchando de ministros gubernamentales, líderes del mundo empresarial y de organismos no gubernamentales de todos los lugares del mundo y que son participantes y protagonistas de esta agenda. Vamos a escuchar del presidente y su percepción de este tema.
[Ajay Banga] Muchísimas gracias. Es un placer estar aquí con todos ustedes. Durante décadas hemos hablado sobre el potencial de la agroindustria y el papel que desempeña la agricultura en la configuración del futuro de la seguridad alimentaria, la nutrición, el crecimiento y el empleo. También hemos examinado estos retos desde distintos puntos de vista, como mejorar la producción alimentaria, impulsar la productividad, resolver problemas de escasez de agua, los fertilizantes, la infraestructura y el financiamiento. Y estos desafíos se han convertido en muchos casos en obstáculos para aprovechar el pleno potencial de esta industria. Pero algo ha cambiado en la actualidad, y esto es que se están produciendo tres cambios fundamentales que hacen de este, un momento ideal para una nueva estrategia para el Grupo Banco Mundial. Para empezar, la agricultura es cada vez más vulnerable a los riesgos climáticos y contribuye de manera significativa a las emisiones. Sin embargo, solo recibe el 4 % del financiamiento climático a nivel mundial. Así que existe claramente una oportunidad para aprovechar estos recursos, para promover la agricultura climática de forma inteligente y aumentar la productividad, al igual que reducir las emisiones. En segundo lugar, hay nuevas herramientas que pueden abrir puertas para que el capital privado fluya hacia el sector agrícola. Hemos visto garantías de crédito, los mecanismos de primera pérdida, instrumentos que contribuyen a que los préstamos sean más seguros y viables desde el punto de vista comercial. Estas herramientas financieras, combinadas con reformas regulatorias, pueden crear un entorno propicio para la inversión privada. En tercer lugar, en el pasado, llegar a los agricultores de forma individual era difícil, y especialmente para empresas de tecnofinanzas o bancos comerciales era muy difícil. El progreso en la digitalización y las nuevas herramientas digitales han creado oportunidades para agrupar agricultores, conectarlos con compradores y servicios financieros y tecnologías innovadoras para mejorar la productividad. Y tengo justamente experiencia de esto en mi vida pasada. El concepto de la huella digital, crear un historial crediticio para los agricultores, para reducir también el costo de estos servicios, hasta llegando a un 90 % del costo original, si no dispusieran de ese historial crediticio. En cuarto lugar, una parte significativa del financiamiento de las agroindustrias viene de las empresas y comerciantes de alimentos, que a menudo operan de forma aislada. Y esto crea fragmentación, pero también aísla a los pequeños agricultores de esos beneficios que podrían percibir de esta actividad económica. Hemos visto que esas asociaciones de agricultores, anteriormente conocidas como cooperativas u organizaciones de productores, que pueden superar estos retos del pasado. Y estos cambios tienen el potencial de reconfigurar el panorama de la agroindustria. Y creo que llega en un momento de oportunidades extraordinarias, ya que se prevé que la demanda mundial de alimentos aumente entre un 50 % y un 60 % en las próximas décadas. Pero aprovechar esta oportunidad no se va a lograr sin cambiar nuestra estrategia. Y, para nosotros, el cambio comienza hoy, creando un ecosistema integral para la agroindustria, aunando los distintos equipos del Grupo Banco Mundial para que trabajemos como un solo grupo. Este giro estratégico es posible gracias a la labor realizada en los últimos 16 meses por el personal de la institución, para convertirnos en una institución más coordinada y que opera de forma más sencilla. Y pasamos de los esfuerzos fragmentados a una constelación de soluciones, como quiero llamarlo yo, que incluye el almacenamiento, la logística, la producción, pero con los pequeños agricultores y las organizaciones productoras dentro del seno de esta estrategia. Hemos creado una nueva forma de trabajo que se combina con un nuevo nivel de inversión. Duplicaremos nuestros compromisos con el sector de agrofinanzas en industria, llevándolos a 9 mil millones de dólares anuales para 2030. Con la experiencia del BIRF y la AIF, el fortalecimiento de la capacidad de los servicios del sector público, siendo la IFC y MIGA, los expertos en el sector privado, podemos producir cambios que pueden percibir las empresas y nuestros socios gubernamentales, con el objetivo de aumentar la movilización del sector privado, aparte de esos 9 mil millones de dólares en 2030, incrementando la movilización a 5 mil millones de dólares para 2030. Así que, por ejemplo, nuestras entidades del sector público pueden ayudar a los países a crear regulaciones y estándares para garantizar productos que cumplan requisitos del mercado. Pueden ayudarles a desarrollar redes nacionales de riesgo. En el financiamiento climático, pueden ayudar a los gobiernos a reorientar parte de los 1,25 billones en subsidios a combustibles fósiles, agricultura y la pesca, para incentivar prácticas más ecológicas y desbloquear una fuente importante de financiamiento para el sector. Nuestros equipos del sector privado pueden centrarse en la financiación de la deuda y el capital, la mitigación de riesgo con garantías. Y estas siempre han sido un reto, porque cuando se trata de mitigar riesgo, los productores no han tenido esa facilidad de acceder a nuestros instrumentos fragmentados. Estamos buscando una estrategia integral, reuniendo los distintos recursos bajo una plataforma de garantías del Banco Mundial, de MIGA, que permitan proveer soluciones ajustadas a las distintas necesidades de nuestros clientes. Pero donde veo más potencial es la integración del vínculo entre nuestra labor en el sector público y el apoyo del sector privado, para ayudar a los pequeños agricultores a conectarse con la cadena de suministro. El BIRF tiene una experiencia especializada en trabajar de forma estrecha con organizaciones de pequeños agricultores para mejorar su productividad, la resiliencia climática y convertirles en proveedores viables que puedan llegar a esa escala, la coherencia y los estándares que requiere el mercado. Una vez establecido, la IFC podría intervenir no solamente con ese apoyo financiero, sino también para conectar a esas organizaciones, a esas empresas, con otras empresas que busquen fuentes de calidad. Y obviamente, el cuello de botella va a ser distinto dependiendo de cada país y de cada cadena de valor. No podemos determinar de forma previa estas intervenciones o estrategias de forma universal. Sería un error. Cada país tendrá unos parámetros distintos en la estrategia de lo que es el sistema del Grupo Banco Mundial, podremos identificar y eliminar cualquier tipo de obstáculo ante estas oportunidades. La idea es que podamos transformar la agroindustria, no solo basándonos en la demanda de alimentos, sino también centrándonos en el desarrollo de oportunidades de empleo para nuestros ciudadanos. En los próximos 10 años, 1200 millones de jóvenes de países en desarrollo ingresarán en el mercado laboral. Sin embargo, se prevé que solo habrá 420 millones de puestos de trabajo disponibles en estos países, lo que deja a 800 millones de personas sin un camino claro hacia un empleo. El empleo es dignidad. La pobreza no es solamente un estado físico, sino un estado mental. Tenemos que crear esa esperanza para los jóvenes, para impulsarles a ser una parte constructiva, para perfilar el futuro, para fomentar el crecimiento económico y la oportunidad a nivel mundial. Así que tenemos dos opciones. Darles una oportunidad o crearles más retos debido a la migración o la desesperación. Después del cambio estratégico de IFC en la agroindustria, tenemos el objetivo de abrir el camino hacia un futuro, un futuro que va a impulsar esas posibilidades de forma interconectada, proveyendo calidad de vida y oportunidades y dignidad a través del empleo. La calidad de vida mejora a medida que aumentamos también la productividad agrícola. Las prácticas de producción, quiere decir también traer consigo una reducción de emisiones y un área más limpia. El aumento de los ingresos lleva a inversiones en infraestructura. Las dietas también pueden mejorar, los niños crecen más sanos, pueden mejorar sus oportunidades de educación y las comunidades se vuelven más resilientes y más sanas. Para los jóvenes, el crecimiento de una agroindustria también trae consigo la promesa de una vida mejor. Los empleos en las zonas rurales, en ingresos más altos, ya no crean un ecosistema con tantos obstáculos como en generaciones anteriores. Tienen la oportunidad de buscar carreras gratificantes, sea a través de la agricultura con sus familias o una nueva forma de empleos que podrán tener como una opción a través de su educación. Pero el mensaje principal es que es su decisión. Les dan opciones, la opción de tener un ciclo de prosperidad y progreso. Nos encontramos en una encrucijada. El que elijamos hoy determinará el futuro. Mediante la transformación de la agricultura de los pequeños agricultores a la agroindustria, transformando la agroindustria como una fuente de capacidad para los agricultores, podremos crear un sistema alimentario para mañana, elevar el nivel de vida, crear empleos, pero, sobre todo, crear esperanza. Gracias.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias, presidente Banga, por sus palabras de apertura. Ahora ha llegado el momento de empezar los paneles. Tenemos una serie de paneles esta mañana y voy a dar la bienvenida a las primeras dos panelistas. Para empezar, voy a dar la palabra a Anne Beathe Tvinnereim, ministra noruega de Desarrollo Internacional y a Ndidi Okonkwo Nwuneli, presidenta de la campaña The ONE. Bienvenidas las dos. Estábamos escuchando lo que quería explicar el presidente Banga en cuanto a los retos. Voy a comenzar con usted, Ndidi. Usted creó una empresa con la idea de tener una incidencia sobre la industria alimentaria en Nigeria. ¿Cómo puede combinar el crecimiento económico, asegurando que las personas tengan acceso a alimentos nutritivos pero también proveyendo un salario digno para los agricultores?
[Ndidi Okonkwo Nwuneli] Para empezar, ese término medio en África son las pequeñas y medianas empresas. La mayoría de mi carrera se ha dedicado a desarrollar ese sector y lo que hemos podido demostrar es el poder que tiene la producción local para las comunidades locales. Y lo que se consiguió fue invertir sobre lo que necesitaban los nigerianos para poderlo producir de forma local. Pudimos crear esta empresa alimentaria con 10 000 agricultores, no solamente para mejorar su situación de vida, sino también para mejorar la nutrición de la población local. Lo que pasa es que muchas de estas empresas no tienen un entorno propicio, no conocen la tecnología ni disponen del apoyo, pero cuando se invierte en la creación de estas cadenas y muchas empresas tienen que hacerlo por primera vez, se abre la puerta a un gran potencial. Y lo que hemos podido demostrar a través de nuestra empresa es que no solamente las pequeñas y medianas empresas pueden crear empleo para las mujeres. Un alto porcentaje de las personas trabajando son mujeres, el 90 % son jóvenes. No solamente le proveemos una oportunidad de empleo, creamos una cobertura de sanidad, creamos oportunidades para las mujeres y tiene un efecto catalizador. Mi objetivo es que otras empresas crezcan a escala para que puedan hacer frente a los distintos ámbitos, esa brecha de género y otros retos. África es una de las mejores fuentes de alimentos del mundo. Tenemos alimentos nutritivos, pero nos centramos más como países importadores para brindar soluciones en vez de crear una cadena de valor nacional. Y hemos visto un cambio en este ejemplo porque hemos visto ese potencial de crecimiento a escala y me encanta ver que el Grupo Banco Mundial esté prestando atención a esto. Pero también invertimos en las pymes para que estos entornos sean sostenibles y resilientes en este entorno climático.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias, Ndidi, por sus comentarios hablando de las pymes, hablando de esos alimentos. Nos está despertando el apetito esta mañana. Escuchando su perspectiva, hemos escuchado ya el sector privado. Noruega ha hecho gran hincapié sobre la alimentación y la nutrición en su agenda, desde su perspectiva. Y mi pregunta es: ¿qué están haciendo? ¿Y cómo? ¿Y por qué?
[Anne Beathe Tvinnereim] Bueno, voy a empezar el por qué. La seguridad alimentaria es esencial para nuestra agenda. El alimento es un derecho fundamental. Hace 50 años, el mundo se comprometió a erradicar la hambruna. Hace 50 años. Y esta es la situación en la que nos encontramos hoy en día. Es una vergüenza. El ODS 2 fue el objetivo de desarrollo sostenible que se descarriló antes. Desde 2014 ya vimos un incremento de personas que pasaban hambre, vimos la pandemia, la invasión de Ucrania y todo se aceleró en la dirección equivocada. Ese fue el primer motivo. Pero el segundo es que la producción alimentaria está en el seno de tantos riesgos y amenazas existenciales para el mundo. La producción agrícola es parte del problema climático, pero también es parte de la solución. Así que tenemos que invertir en una agricultura climática a través de la mitigación y la adaptación. Y, en segundo lugar, creo que la inversión en pequeña escala, la producción agrícola, es clave para la erradicación de la pobreza. Creo en ello, lo he visto de primera mano en mi país y sabemos que el 75 % de las personas más pobres del mundo viven en zonas rurales. Y también sabemos, y creo que son cifras del Grupo Banco Mundial, que la inversión en el sector agrícola de África subsahariana tiene un 11 % más de efectividad que otro sector. Y para mí es, obviamente, una decisión inequívoca. Tenemos muchísimos productores de pequeña escala, agricultores, que no pueden acceder a un mercado local. También tenemos un continente como el de África, que está disponible a invertir a 110 000 millones de dólares en esta industria. Es una pérdida de oportunidad y por eso estaba hablando de invertir en esos agricultores de pequeña escala e incorporarles en la cadena de valor, creando miles de empleos.
[Rajini Vaidyanathan] Ndidi, algo que estábamos mencionando, el potencial que representa África fue una conversación que se ha producido durante muchísimos años, África es ese huerto del mundo. ¿Qué necesitamos para lograrlo?
[Ndidi Okonkwo Nwuneli] Ya estamos viendo pasos que se están tomando y necesitamos más. Para empezar, la inversión en la innovación. Tecnología en sistemas de semillas, fertilizantes, soluciones integrales. Vemos instituciones de investigación africanas invertir en soluciones locales para producciones claves como puede ser el ñame, la yuca, el arroz y otros productos. Y lo hemos visto en distintas cadenas de valor. Y también, en segundo lugar, un capital catalizador. Y por eso una de esas intervenciones es de importancia crítica. Queremos un crecimiento liderado por el sector privado, centrado en la creación de valor y la producción. Queremos ampliar a escala a estas empresas. Son empresas que tienen ese compromiso. Hay pequeños agricultores que quieren pasar de la subsistencia al emprendimiento. Y, en tercer lugar, esa transferencia de conocimiento y capacidades. Nuestros jóvenes están interesados en utilizar nuevas tecnologías para crecer a escala. Y también los datos. Tenemos tanta tecnología disponible en el campo de la agricultura que nos permitiría hacerlo. Y también, en cuarto lugar, el acceso a los mercados, no solamente eliminar los obstáculos al comercio en África, sino también poder tener una relación comercial con el resto del mundo, no solamente con bienes procesados, sino productos de alto valor. Eso ha de cambiar. La cara de África no tiene que ser la de un niño con hambre. Tenemos que cambiar esa narrativa y esa imagen para asegurarnos de que cuando hablemos de África, pensemos en una mujer emprendedora exitosa y que los productos africanos estén bien presentados y disponibles en los mercados. Pero también hemos visto muchos ejemplos de éxito. Productores africanos, trabajamos con emprendedores africanos que están creando una oportunidad de crecimiento a escala, pero queremos ver más. Estoy con muchas ganas de ver un cambio. Me encanta ver que el Banco Mundial está priorizando el valor agregado en África porque es claro para los empleos, esencial para reducir esa brecha de género y cambiar esa imagen o esa narrativa.
[Rajini Vaidyanathan] Y sí, desde luego es inspirador escuchar este mensaje desde su perspectiva. Hemos hablado de la AIF, la Asociación Internacional de Fomento, y usted como ministra de Noruega está intentando ayudar a AIF. Noruega también contribuye a la AIF, un fondo que apoya los países en desarrollo en el Grupo Banco Mundial. ¿Cómo puede la AIF cambiar la ecuación aquí?
[Anne Beathe Tvinnereim] Pues desde luego la AIF es clara y esencial en esta situación de producción alimentaria y agrícola. Y por eso tenemos que hacer campaña esta semana para asegurarnos de que esa reposición de capital de la AIF sea exitosa. Hay tanta fragmentación en la arquitectura de desarrollo y tenemos que entender qué funciona. La AIF multiplica por tres y medio o cuatro, incluso, cada dólar invertido por sus donantes. Y, además, me encanta ver que la seguridad alimentaria y la agricultura sean una prioridad en estas reuniones. Queda muy claro que la AIF será una solución para dar respuesta a estos retos, pero también para crear oportunidades. Un ejemplo, vemos que Brasil, presidiendo el G20 este año, ha dado prioridad a la seguridad alimentaria y al hambre, especialmente con esa alianza en contra del hambre que se ha preparado para el mes entrante. Y creo que es esencial dentro de esa alianza. Creo que esa alianza mundial tiene muchísima importancia y creo que la mejor forma en la que lo podemos hacer es teniendo a la AIF como colaboradora en esta Alianza Mundial. No podemos seguir creando nuevos fondos cada vez que se plantea un nuevo reto. Vamos a utilizar las herramientas que tenemos a nuestra disposición y que funcionan. La AIF funciona.
[Rajini Vaidyanathan] Tenemos cinco minutos todavía, pero antes de cerrar tengo una pregunta que está en el seno de esta conversación y que mencionó el presidente Banga. Y volviendo a usted, ministra, ese reto de la resiliencia climática. ¿Cómo se puede lograr esto en un mundo de emergencias climáticas?
[Anne Beathe Tvinnereim] Como ya mencioné, la producción alimentaria es parte de la solución y no es solamente parte del problema. Y lo que me gustaría ver en el futuro es que podamos conectar los distintos puntos. En las próximas semanas vamos a hablar en la COP sobre los retos climáticos y mensaje principal es que esto sea parte de la prioridad de la agenda de la COP también. Tenemos que traer a estos pequeños productores en la primera plana de nuestras conversaciones. Solo 0,8 % del financiamiento climático internacional llega al agricultor de pequeña escala. Eso es absurdo, porque ese hombre, esa mujer, está en la primera fila en los términos de afectos del cambio climático. Así que más fondos tendrían que llegar a estos agricultores. Pero, en segundo lugar, invirtamos en esas cadenas de valor. Esta semana, Noruega va a lanzar un fondo con USAID, el FASA Funds. Es el primer fondo de su especie y es un principio muy sencillo. Estamos lanzando un mecanismo de primera pérdida en el que se pueda invertir en esas personas, que en su mayoría son mujeres, que están creando valor agregado a la producción de los agricultores. Estas mujeres muchas veces no llegan a acceder a fuentes de financiación, son demasiado pequeñas para los bancos privados y demasiado grandes para las microfinanzas. Así que tenemos que centrar nuestra atención en este perfil y podemos hacer un gran cambio.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias, Ministra. Ha recibido un gran aplauso hablando de que la producción alimentaria sea un punto principal de la agenda climática. ¿Cómo puede esa conversación cambiar, Ndidi?
[Ndidi Okonkwo Nwuneli] Hay dos cosas. Estoy totalmente de acuerdo. Necesitamos un enfoque ecosistémico para abordar el tema del desafío climático. En nuestro contexto, los alimentos son medicina. Entonces, los alimentos son críticos, son sustento de vida, cultura. Y como digo, críticos, no solo como soluciones al problema del cambio climático, sino también para mejorar la resiliencia. Yo creo firmemente en ello. La campaña que estamos promoviendo tiene que ver con un compromiso para apoyar y trabajar con los países africanos a través de la crisis y estar relacionado con las conversaciones sobre la deuda. Muchos países tienen que escoger entre pagar a las escuelas o el sistema de salud o la amortización de la deuda. Así que nos interesa enormemente colaborar con los países africanos para ver esas permutas de deuda, esos canjes de deuda y vincularlo con temas de salud, educación. Y me gustaría ver que esas conversaciones tengan lugar, porque es crítico. El segundo tema es que necesitamos voluntad política al nivel más alto. Seguimos los fondos climáticos, ahí donde van. Y lo triste de esto es que no acaban donde deberían acabar. Entonces, el tema de adaptación, innovación, es muy importante. Se necesita financiamiento a nivel local y hay que rendir cuentas para hacer lo correcto. Finalmente, se necesita también de cooperación internacional para asegurarnos de invertir en financiamiento catalítico. Tenemos que ver mucha más polinización. Ese capital catalítico para asegurarse de que África se alimenta a sí misma, pero también puede alimentar al mundo. Y es posible. Muchísimas gracias.
[Rajini Vaidyanathan] Gracias a ambas, ministra Tvinnereim y también Ndidi. Muchísimas gracias porque han tenido comentarios muy provocativos, muy interesantes y un recordatorio sobre cuáles son los desafíos y las oportunidades. Ahora vamos a hablar con personas o actores clave de Brasil, India y Senegal para escuchar qué es lo que tienen que decir sobre los alimentos y el crecimiento mundial. Antes de hacerlo, vamos a darles una idea del potencial en este sector. Podría haber un beneficio de 5 a 10 mil millones de dólares estadounidenses cada año si la agroeconomía produjera alimentos nutritivos que tenga bajas emisiones y sea resiliente al cambio climático y se pague a los agricultores correctamente. El 80 % de los agricultores no tiene acceso a finanzas, tecnología ni mercados. Esto significa que las personas que realmente mueven el sector están marginadas. Hay 650 mil millones de dólares estadounidenses que gastan los gobiernos para apoyar el sector agrícola. El Banco Mundial cree que, si simplemente el 10 % de esos gastos se utilizara mejor, los beneficios podrían ser realmente enormes. Por ejemplo, podrían ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 40 %. Para hablar de esto en mucho más detalle, vamos a darle la bienvenida al siguiente panel. Francisco P. Tiu Laurel, el secretario del Departamento de Agricultura de las Filipinas. Vera Esperanca dos Santos Daves de Sousa, ministra de Economía de Angola. La pregunta, entonces, que vamos a examinar en esta sección es: ¿Qué pueden hacer los gobiernos para crear un mejor sistema? Voy a empezar con usted, secretario Tiu Laurel. En las Filipinas, han trabajado arduamente para que el sector de arroz sea muy competitivo a través de diferentes cambios. Eso ha reducido el precio para los consumidores. Al final, importan mucho menos arroz. Dependen mucho menos de esas importaciones. Así que, ¿cómo lo han hecho y cómo eso ha mejorado la vida de los agricultores?
[Francisco P. Tiu Laurel] El principal objetivo es que los agricultores aumenten su rendimiento, su producción. Si aumentan por hectárea, van a tener más ingresos. Pero no es tan fácil como eso. Simplemente tenemos que utilizar mucha tecnología. Las semillas correctas en la temporada correcta. Tenemos que adaptarnos a nuevas técnicas agrícolas. Incluso tuvimos que cambiar nuestro calendario de cosecha en muchas zonas para alcanzar una mejor producción y aumentar la intensidad de nuestras cosechas. Así que es todo un conjunto de cosas que han sido necesarias para aumentar los ingresos de nuestros agricultores. Que sean solventes para que también vuelvan a replantar todas las temporadas.
[Rajini Vaidyanathan] ¿Cómo han recibido el cambio los agricultores? Como ya hemos escuchado, tiene que ver con el empoderamiento también de los agricultores, ¿correcto?
[Francisco P. Tiu Laurel] Lo han recibido bastante bien, siempre y cuando haya apoyo por parte del Gobierno, por supuesto. Apoyo, quiere decir un poquito de subsidios, un poquito de financiamiento y también seguros. Ese es otro componente importante, lo que se necesita hacer, además de decirles a los agricultores, porque tenemos agricultores de pequeñas parcelas que les vamos a dar un paquete muy atractivo, les interesa, y ahora todo el mundo está muy dispuesto a formar parte de una cooperativa, una asociación que trabaje con nosotros.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias, Secretario. Ministra, ahora usted, en Angola, están embarcándose ahora en una transformación también sumamente ambiciosa, intentando alejar las inversiones, no invertir tanto en petróleo, invertir en agricultura. ¿Cómo lo están haciendo y qué desafíos están enfrentando?
[Vera Daves De Sousa] Muchas gracias. En primer lugar, es un cambio de mentalidad. Tenemos que asegurarnos que generamos conciencia sobre la importancia de diversificar la economía y también llevar a cabo trabajo, empresas, negocios, donde el beneficio no sea tan débil, sino que esté bien pagado, con un impacto positivo. Estamos desarrollando eso y estamos viendo cómo aumenta el interés. Le voy a ser totalmente sincera. Estamos viendo un movimiento muy fuerte en cuanto a agricultura familiar con pequeños agricultores, pero tenemos que seguir trabajando para ampliar la agricultura comercial. Los desafíos son los mismos: infraestructura, es decir, tener carreteras que sean buenas para asegurarnos de poder mover la producción de las granjas a los centros urbanos. Almacenamiento refrigerado. Buenas condiciones para asegurarnos de que la producción se mantiene en buenas condiciones durante largos períodos de tiempo. El sistema financiero ha tenido que reformarse para acomodar a estos agronegocios. Ha habido que recalibrar los seguros. Los grupos de inversión de los bancos tienen que estar listos también para concentrarse en este nicho. El tema de la liquidez del sistema, se necesita que haya liquidez disponible y luego también los conocimientos, por supuesto. Conocimiento sobre productividad, cómo aumentar la producción. Se está poniendo mucha energía en estas variables para ayudarnos a realmente apoyar a las familias para que produzcan más y que se formalice su trabajo, tenga una empresa rentable, no solo para poder comer ellos mismos, mantenerse a ellos mismos, sino para ganar dinero también y atraer más agricultura comercial para continuar aumentando nuestro potencial y poder exportar.
[Rajini Vaidyanathan] Entonces, tomando lo que has dicho aquí sobre atraer interés comercial, este es el tema del evento, ese equilibrio entre lo que puede hacer el Gobierno y lo que puede hacer el sector privado, ¿cómo está navegando ese desafío?
[Vera Daves De Sousa] Estamos haciendo lo necesario para generar las condiciones básicas para que se genere dicho interés. Un buen entorno fiscal para atraer dicho interés. Estamos haciendo o poniendo garantías públicas, incluso liquidez, en las instituciones financieras, a disposición para el sector privado, para aquellos que quieran invertir. Abrimos líneas financieras para los que quieran participar en esto. Y luego también estamos viendo cómo podemos ayudar a hacer ese puente de interés entre los que están produciendo y los que quieren importar. Los sentamos a la mesa para que hablen y forjamos nuevas relaciones.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias. Secretario Laurel, le voy a hacer la misma pregunta: ¿Qué tipo de colaboración están desarrollando con sector privado? ¿Qué papel desempeña las instituciones financieras en su país en lo que se refiere a la transformación del sector agrícola?
[Francisco P. Tiu Laurel] En cuanto a lo que está haciendo mi Gobierno, estamos celebrando reuniones quincenales o incluso mensuales con el sector privado y otros actores. Queremos tener como una lluvia de ideas y fusionar también las iniciativas para que ambas partes, el Gobierno y el sector privado, sigan la misma hoja de ruta en cuanto a seguridad alimentaria. Esto es muy importante para el sector agrícola. Estamos también trabajando con instituciones financieras que son un actor sumamente importante. El Departamento de Agricultura de las Filipinas forma parte del Banco de Desarrollo de las Filipinas y el Banco de Tierras de las Filipinas. Y el Grupo Banco Mundial, por supuesto, sería una parte clave de la ecuación. El Grupo Banco Mundial sería de gran ayuda para el sector agrícola en las Filipinas.
[Rajini Vaidyanathan] Ahora me gustaría hacerle una pregunta más. De nuevo, tiene que ver con el tema de esta conversación en general. Como hemos dicho antes, Secretario, antes de estar aquí, la única vez que yo visité su país fue para cubrir un tifón que azotó a las Filipinas como consecuencia del cambio climático. ¿Qué piensa usted sobre cómo eso influye en el trabajo que tiene usted como Gobierno, el trabajo de los agricultores? ¿Cómo pueden producir alimentos nutritivos, saludables y encontrar ese equilibrio con el cambio climático, abordar el cambio climático?
[Francisco P. Tiu Laurel] Tenemos como 23 tifones al año de promedio. Acaba de pasar El Niño, luego La Niña. Y lo que hemos visto es que necesitamos mucha infraestructura. Es un gran desafío para las Filipinas. Almacenamiento de agua, de carne, de verduras, de hoja verde, verduras en general, almacenamiento refrigerado. Así que para abordar o limitar el impacto del cambio climático, tenemos realmente que invertir mucho en temas de infraestructura y el sistema de logística de la cadena alimentaria de las Filipinas.
[Rajini Vaidyanathan] Es una parte clave el tema del almacenamiento de todo. Muy interesante. ¿Eso es una perspectiva similar para el caso de Angola?
[Vera Daves De Sousa] Sí, pero también estamos trabajando con nuestros socios multilaterales. Para ser más específicos, tenemos un proyecto con el Grupo Banco Mundial para aumentar nuestra resiliencia, la resiliencia de los cultivos, de los agricultores, de toda la cadena de producción ante las consecuencias del cambio climático. Así que tenemos también otra iniciativa donde nosotros estamos haciendo todo lo posible por mitigar el impacto del cambio climático. En la producción agrícola, los agricultores, con el apoyo de otros socios, estamos también dedicando nuestros propios fondos, fondos públicos. Así que sí, por supuesto, tiene que ver con infraestructura, pero también tiene que ver con, por ejemplo, temas de irrigación, aunque la irrigación forma parte de ello. Tiene que ver también con estudiar los cultivos, cómo se producen y asegurarse de que los agricultores tengan los conocimientos adecuados, tienen que saber sobre semillas, fertilizantes, sobre cómo producir de manera más eficiente y qué hacer cuando tiene un evento relacionado con el cambio climático.
[Rajini Vaidyanathan] Sí, son comentarios muy interesantes sobre cómo está intentando trabajar con el sector privado y qué es lo que puede hacer el Gobierno, así como el punto de vista de los agricultores mismos. Muchísimas gracias. Recuerden, pueden enviar cualquier pregunta sobre lo que hemos conversado hasta ahora sobre este tema. Pueden utilizar la etiqueta #WBGMeetings o también pueden mandar mensajes a envivo.bancomundial.org. Si están aquí en la sala, se pueden quedar aquí y también hay códigos QR por toda la sala que pueden utilizar. Vamos a pasar a la siguiente porción de esta conversación. Vamos a continuar con otro panel mundial. Les vamos a dar una idea de la importancia de esta conversación, porque la economía alimentaria, lo pueden ver en pantalla, emplea a 1200 millones personas en todo el mundo. La agricultura es realmente un gran creador de empleo en África, por ejemplo, la agricultura genera el 68 % de los ingresos rurales. Y en muchos países o economías en desarrollo, las redes informales brindan hasta el 25 % de los servicios financieros para esos pequeños agricultores. Hay soluciones. Si los agricultores tienen acceso a servicios bancarios y mercados, se piensa que el sector podría sumar 500 mil millones de dólares a la economía mundial en los próximos cinco años. Esto realmente es una cantidad muy significativa. Tenemos aquí para hablar de este tema durante esta sección del programa Mabouba Diagne, ministro de Agricultura, Alimento, Soberanía y Ganadería de Senegal. Muchísimas gracias. Es S. Divyadharshini, CEO del Proyecto de Transformación Rural, Ishmael Sunga, Director Ejecutivo de la Confederación de África al Sur. Y finalmente, pero no por ello menos importante, Ayodeji Balogun, Director Ejecutivo también de AFEX en Nigeria. Sentémonos. Bienvenidos. Seguramente hayan estado escuchando la conversación hasta ahora, hablando del potencial de este sector en cuanto a creación de empleo. Ministro, comencemos con usted. Acabamos de hablar de esto en detalle. Hemos hablado de cómo el capital privado puede desatar una transformación de la economía mundial. ¿Cómo lo ha hecho para su país?
[Mabouba Diagne] Actualmente, Senegal está importando casi 2000 millones de dólares para alimentar a su pueblo. 1,4 toneladas de arroz, más de 8000 toneladas de trigo, miles también de maíz, de vegetales, de verduras. Y a lo largo de esa cadena de valor de estos productos básicos, se podrían generar cientos de miles de empleos, creando cooperativas en las diferentes partes del país, desde la producción certificada de semillas, desatando la cadena de valor a lo largo de toda la producción, transformación, almacenamiento y vinculando el mercado nacional con el regional y el internacional. Creemos firmemente que solo a través de esta cadena de valor se pueden generar esos miles de empleos. La agricultura y la ganadería son importantes para nuestros países. La tecnología se puede aprovechar para realmente avanzar, dar un paso adelante en cuanto a cómo se alimenta África, pero también en la agroindustria e introducirla en el mercado internacional. Senegal está importando casi 100 millones de euros de leche en polvo todos los años. Los productos son locales. Necesitamos 5000 vacas y hectáreas para esta ganadería. Pensemos en el número de empleos que se podrían crear con esta agricultura y esta ganadería, la transformación de la leche a nivel local. Estos serían decenas de miles de empleos que se podrían crear. Después de pasar muchos años en el sector bancario internacional, cuando volví a mi país, me concentré en ello. Generé o abrí diferentes compañías y generé mucho empleo. En los próximos meses, vamos a crear también más de 500 empleos. Yo creo firmemente que al ser ministro de Agricultura, eso es lo que estoy intentando replicar también, pidiendo al sector privado, a través de colaboraciones público-privadas que apoyen al Gobierno en estas iniciativas.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias, Ministro. Muy interesante el ejemplo que ha brindado, porque también se trata de entender el mercado desde esa perspectiva, qué es lo que quieren los agricultores, qué es lo que necesitan, entender el potencial, pero, por supuesto, también el potencial de colaboración con el sector privado. Ayodeji, hablemos de este tema, de la perspectiva del sector privado. Su compañía, AFEX, tiene un modelo que pone en contacto a los agricultores con los mercados. ¿Cómo funciona? ¿Cuáles son los beneficios?
[Ayodeji Balogun] Muchas gracias. Cuando vemos cuáles son los modelos que funcionan, la primera pregunta es: ¿Estamos creando el modelo correcto para la agricultura? ¿Cuál es el modelo actual para nuestro sector agrícola? Para el agricultor, primero tenemos que generar un modelo que mínimo le dé al agricultor 10 000 dólares al año. Y una vez que tenemos ese modelo, generamos los incentivos adecuados para atraer talento. África tiene por primera vez una situación donde los agricultores tienen un teléfono celular. Pero todavía comerciamos con ello como lo hacíamos hace 30 años, así que tenemos que empezar a modernizarnos. En AFEX, pensamos en ello como los programas que tienen las aerolíneas. Cuando un agricultor forma parte de la red de AFEX, tiene acceso a servicios, como, por ejemplo, acceso a información sobre qué productos cultivar, en qué momento, acceso a mercados, almacén de productos. Esa infraestructura mejora su productividad, genera un mercado y brinda el mejor precio disponible. Y eso lo tienen todos por ser miembros de la red de AFEX. Y, luego, intentamos asegurarnos que pasen de los ingresos que están recibiendo ahora mismo en subsistencia a ingresos mucho más altos para atraer a esos agricultores. Y estamos intentando implementar ese modelo que promete mayores ingresos para todos en la comunidad.
[Rajini Vaidyanathan] Así que lo que estás diciendo es que se trata de modernizar el sector. En cuanto a ese tema, le quiero hacer una pregunta a Divyadharshini. La conversación no se trata solamente de los hombres aquí. Yo he vivido en India, he visto a muchas mujeres trabajando en el campo. Las mujeres desempeñan un papel muy importante en la agricultura en todo el mundo. Igual no siempre es reconocido. Háblenos del trabajo que usted realiza para superar algunos de los desafíos que las mujeres enfrentan en el sector agrícola cuando se trata de recibir apoyo, el problema en los bajos salarios, ser menos visibles.
[S. Divyadharshini] En India, la agricultura emplea el 80 % de su mano de obra siendo mujer. En cualquier país donde la participación de la mujer aumenta en el mercado laboral, mejora la economía de la nación en su totalidad. En India, las mujeres contribuyen no solo como jornaleras, sino también las políticas del Gobierno han garantizado que las mujeres participen o sean partícipes en empresas de agronegocios. Entonces, lo que hemos visto que ha hecho el Gobierno de India a través de muchos programas, es que, colaborando con agencias internacionales como Grupo Banco Mundial, hemos garantizado el empoderamiento de la mujer, generando iniciativas de sustento de vida y también generando y promoviendo el emprendedurismo. ¿Qué ocurre? Que permitimos que las mujeres tengan acceso a mercados, a instituciones financieras formales y al financiamiento disponible a través de las mismas, y luego también acceso a mucha capacitación para mejorar sus habilidades, sus conocimientos. Todo esto tiene que ver para asegurarse de que se mejoran las habilidades, aumentan las oportunidades y los papeles basados en género no se estereotipan y se rompe con esos estereotipos. Entonces, las mujeres no están vistas ahora únicamente como personas que ocupan los trabajos tradicionales para mujeres, sino que están rompiendo barreras. También gracias a las políticas del Gobierno de India, se ha garantizado que las mujeres crezcan y generen una economía rural para poner fin a esa migración.
[Rajini Vaidyanathan] Entonces, ahora pasamos a usted. Usted genera también mucha conexión a través de las fronteras. Hemos hablado del impacto en la mujer, el empoderamiento de la misma, el papel de la tecnología. ¿Qué papel desempeña estos factores en el trabajo que usted realiza?
[Ishmael Sunga] Son muy importantes la tecnología, las políticas, la innovación en general. Es lo que motiva el cambio a escala y a la velocidad necesaria, que es lo que necesitamos, en vez de hacer las cosas de manera aislada y mucho más lenta. Yo creo que el punto de conectar a los agricultores a través de la frontera es muy importante, porque los agricultores se enfrentan a problemas muy similares, independientemente de la frontera. Por lo tanto, se necesita hablar con una sola voz. Luego también es un poco irónico que, aunque los agricultores son el segmento más grande de la población en la mayoría de los países en desarrollo, y también producen los alimentos que todos comemos, y eso subraya cuán importantes son, ellos continúan siendo los que más sufren problemas de desnutrición y continúan siendo los más pobres. Y eso es algo realmente negativo. Y para el tipo de agricultura que realizamos, tanto para agricultores jóvenes como mujeres, ellos son el motor de la nutrición, del desarrollo, de todo. Y continúan siendo los más pobres. Así que tiene que ver con cómo llevamos a cabo labores de desarrollo. Esto se trata de desequilibrio de poder. Ya estemos hablando de mujeres o de agricultores jóvenes o generales entre los diferentes actores en la cadena de valor, se trata de la distribución de riesgo y de recompensa. Si se pone la mayor parte del riesgo en el productor principal, el menor rendimiento, no está bien, y a medida que un riesgo sube, a medida que avanza en la cadena de valor, también disminuye el riesgo, aumenta el beneficio y eso genera mucho desequilibrio de poder. Entonces, es importante que, si hablamos de una nueva generación de agricultores, que es fundamental, es muy importante, por diferentes razones tenemos que hablar de emprendedurismo. Y cuando hablamos de eso, no es el fuerte de todos. Tenemos que segregar o diferenciar, mejor dicho, los diferentes tipos de agricultores. El 25 % del superávit viene de la agricultura y esto lo representa más o menos el 100 % del 25 %. Así que ese emprendedurismo tiene que estar bien enfocado en aquellos que tienen la capacidad de hacerlo. Lo hemos puesto a prueba y funciona. Yo puedo mencionar más cosas más tarde.
[Rajini Vaidyanathan] Muchas gracias. Puntos muy importantes, lo ha resumido muy bien. Algunas de las personas que fabrican, o, mejor dicho, que producen los alimentos que todos comemos, están entre los más pobres del mundo y los más desnutridos. Y eso realmente es una afirmación realmente chocante. Ministro, ¿qué pueden hacer los gobiernos para garantizar que las personas que están produciendo nuestros alimentos, los alimentos que nosotros comemos, tengan una alimentación, una nutrición adecuada, que tengan acceso a los alimentos que ellos producen y que tengan los salarios dignos y que el precio de esos productos también sea el correcto? ¿Qué pueden hacer los gobiernos?
[Mabouba Diagne] Voy a empezar haciendo eco lo que ha dicho el presidente Ajay. ¿Qué es lo que está haciendo el Banco Mundial? Todo el mundo bajo el mismo tejado. Eso es muy importante. Va a ayudar a los gobiernos, no solo a hacer las cosas bien, sino también a generar las políticas adecuadas y también los incentivos correctos. Si ven al Grupo Banco Mundial, dentro del Grupo Banco Mundial está MIGA, que puede desempeñar un papel clave a la hora de ayudar al Gobierno a disminuir los riesgos. Tenemos la IFC, que puede apoyar al sector privado. El Gobierno puede desatar el potencial de las colaboraciones público-privadas. Luego está el banco en sí y luego también está el presupuesto público del país, combinando todos esos elementos, además del seguro, con un programa específico, ya uno tiene todos los ingredientes necesarios para que el Gobierno pueda apoyar a los pequeños agricultores para obtener acceso a buenas semillas certificadas, buenos insumos, mecanización, mejora de las capacidades y avanzar, dando grandes pasos a través de la tecnología para poder producir alimentos, no solo al precio más competitivo, porque sin competitividad, sin productividad, vamos a continuar invirtiendo dinero sin solucionar el problema. Ese es el número uno. Número dos. También impulsando o empujando a los gobiernos africanos a que pongan sus fondos o recursos donde estén las prioridades, intentamos resolver todos los problemas, pero es igual que darle una aspirina a un enfermo. Estoy convencido de que invirtiendo los fondos en un sector adecuado y aunando no solamente al Grupo Banco Mundial, sino al sector privado, podríamos abrir la puerta a otras oportunidades, sobre todo en una forma sostenible.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias. Voy a también hablar con Ayodeji, porque Ishmael justo mencionó algo que tiene todo el sentido con el trabajo que ustedes hacen. Si los salarios no son atractivos, si no se percibe este sector como un medio de sustento atractivo trabajando con los agricultores, ¿cómo pueden trabajar en este trabajo ancestral, pero tenemos a jóvenes que buscan nuevas formas de generar ingresos. ¿Cómo pueden decirles a los jóvenes que esto es viable?
[Ayodeji Balogun] Pues en realidad tiene que ver con la productividad. Si vemos los estudios de mercado sobre el alimento en África, se ve claramente que se puede incrementar un 150 % en la producción alimentaria y el valor agregado. Y eso pasa por la mejora del rendimiento y de la cosecha. E identificar en este sentido, qué necesitan los agricultores, teniendo en cuenta las especificidades del terreno que están cultivando. Y también el acceso a los recursos. Los agricultores saben lo que tienen que hacer y el volumen, pero no tienen acceso a los fondos. Y en ese sentido, como cultivan poco, el ingreso es poco, tienen pocos recursos. Y el otro ámbito es el clima, cómo pueden adaptarse al cambio climático. He visto ejemplos… Costa de Marfil, en el río Coco, en la parte sur, se cultivaban distintos cultivos y ahora vemos que en la zona sureste hay otros problemas y van a ver que hay un cambio de terrenos cultivados de una región a otra. Pero también vemos que el cacao se cultiva en otros países. ¿Cómo podemos ayudar a los agricultores a adaptarse, cultivar los cultivos adaptados, incluso a nivel molecular de las semillas? Y tenemos una serie de elementos que se pueden hacer a mediano plazo para asegurar un incremento de ingresos. Pero también otro aspecto es cómo organizar a los agricultores. Uno de los retos principales que vemos en África es que los agricultores, el 80 % de ellos, viven en el campo, en otros países, ven que son parcelas más grandes. Pero es lo contrario en África. ¿Cómo se pueden encontrar soluciones que puedan llegar a estos agricultores a escala con el impacto adecuado, pero de una forma comercialmente viable? Tenemos que plantearnos el futuro o el modelo de estas asociaciones agrícolas o crear empresas, dando oportunidades a pymes que puedan incorporar una tecnología que llegue a estos agricultores a esa escala y cómo podemos atraer recursos para ver un mayor crecimiento en este ámbito.
[Rajini Vaidyanathan] Ishmael, también quería referirme a usted, pero voy a pedirle también la perspectiva de sudeste asiático de Divyadharshini. ¿Cómo pueden ustedes motivar a los jóvenes que ya tienen acceso a estudios? ¿Cómo les pueden atraer a la agricultura para que se convierta en una propuesta atractiva en el próximo siglo?
[S. Divyadharshini] En la India, muchos proyectos se han centrado en el cultivo y la agricultura, y más precisamente en el emprendimiento agrícola. Y como se ha mencionado ya, hay que darle ese enfoque, esa atención. Se está produciendo en áreas rurales y en áreas semiurbanas. Si se puede crear un ecosistema de valor que esté incluyendo también áreas rurales, ahí se pueden evitar esas migraciones, crear un ecosistema para asegurarnos de que la economía rural esté empoderada. Uno de los proyectos que estamos implementando en India es la transformación rural, que tiene como objetivo crear un ecosistema integral que permita, a través del liderazgo de varios emprendedores, crear un entorno que fomente la agroindustria y la agroempresa, como mencionó el presidente esta mañana, que puedan tener acceso a instituciones financieras formales, les empoderemos a tener acceso al mercado y rompemos con estereotipos de género. Lo que normalmente se veía como una empresa típicamente operada por hombres, ya se cambia esa perspectiva. En un distrito más conservador, en Tamil Nadu, en la India, ven a mujeres que reciben capacitación y están entrando en el sector de la construcción y tienen contratos, están construyendo edificios, ya no solamente son agricultoras, también acceden a otros empleos. Y eso es lo que hace esa capacitación, acabar con esas barreras. Y también, ¿cómo se puede hacer esa capacidad? Hablé de crear una economía de emprendimiento. En Tamil Nadu, creamos colectivos o cooperativas de mujeres emprendedoras, y de esta forma permiten que estas mujeres estén a cargo de tomar las decisiones. Así que evitan que los hombres entren a tomar decisiones. Y cuando una vez se les da empoderamiento en una economía rural, podrán caminar ellas solas a su propio paso hacia el futuro.
[Rajini Vaidyanathan] Un trabajo inspirador que están haciendo en el campo. Ishmael, hablamos de esa necesidad de cambio, sea a través de la tecnología o dando más voz a las mujeres. Usted representa una Confederación de Sindicatos Agrícolas. Debe haber alguna reticencia al cambio, no a todo el mundo le gusta cambiar. ¿Qué están diciendo ellos sobre esos retos a los que quieren ellos darle solución?
[Ishmael Sunga] Bueno, para empezar quisiera mencionar una serie de mensajes que estoy escuchando, basándonos en el trabajo que estamos haciendo. Tenemos que cambiar, cambiar cómo vemos ese tema de atraer a los jóvenes a la agricultura. Creo que se están equivocando en términos de perspectiva, desde mi punto de vista. No hay que vender la agricultura, no vendamos la agricultura. Vendamos oportunidades para emprendimiento. Eso es lo que tienen que vender. La agricultura no es atractiva cuando lo ven en términos simples, pero si se entiende la oportunidad empresarial, de emprendimiento, que esto representa, ahí pueden generar entusiasmo entre los jóvenes. Y cuando hay entusiasmo, vamos a tener muchas manos que quieran entrar a la obra. Y muchas de estas personas no vienen del sector agrícola, a lo mejor vienen de otros sectores, sector farmacéutico o tecnológico. Sea el que sea, han visto esa oportunidad y la están tomando. Vemos a personas que trabajan en adaptación y mitigación, pero no hablan de cambio climático, están hablando de beneficios, de ingresos. No vendan adaptación y mitigación, vendan oportunidades de emprendimiento. Y la tomarán, tomarán esa oportunidad. No están hablando de financiamiento. Somos una nueva generación de lo que se llama “agroemprendedores” en África, que están liderando su ambición para generar beneficios. Pero si no ponemos los beneficios en el seno de sus prioridades, todos los elementos, la adaptación, mitigación, cambio climático, son un efecto colateral beneficioso, pero hay que vender ese mensaje principal y plantearnos cómo estamos diseñando las cosas. También hablemos de, por ejemplo, el caso de una chica joven que venga de Malaui, que esté haciendo algo como producir miel con abejas, pero tiene varias cosas que son fascinantes. Y, por ejemplo, está alquilando árboles de sus vecinos de forma mensual para que se puedan utilizar para alimentar a sus abejas. Eso se puede incluir en una plataforma digital. Y no solamente llegar al agricultor, el agricultor tiene que llegar a la empresa. No siempre tenemos que ir a ver a los agricultores. Es un segmento que, obviamente, amerita atención, pero también tenemos que aprovechar la tecnología digital para poder aliviar esa fragmentación y crear una propuesta empresarial para empresas. Así que, para mí, las oportunidades no tienen límite. Lo que pasa es que, en vez de invertir en las cosas equivocadas, hay que invertir en el emprendimiento. El emprendimiento no solamente es dinero, tecnología, semillas, mercado, es una idea, es un concepto. Así que estamos vendiendo esa confianza, la confianza que les va a llevar a un empleo. Son la próxima generación de empleadores, no de empleados.
[Rajini Vaidyanathan] Vamos a hablar de esa oportunidad, pero obviamente se nos acaba el tiempo. Podría escucharle toda la mañana. Muchísimas gracias. Creo que estamos todos de acuerdo en decir que, desde luego, muy interesante ese ejemplo de esa productora de miel. Sí, desde luego, en muchos casos se acaba en un ejemplo claro como esos productores de leche o de miel. Pero, lastimosamente, ya no tenemos más tiempo, pero muchísimas gracias por compartir su experiencia. Gracias. Tenemos un panel todavía ante nosotros. Y, por favor, permanezcan con nosotros, si pueden. Y ahora vamos a hablar de las dimensiones medioambientales cuando se trata de la agricultura y los alimentos. Ya hemos hablado de esto, pero vamos a hablar de cifras. La producción agrícola mundial produce más gases de efecto invernadero de lo que uno piensa, un tercio a nivel mundial. Y es más lo que emite toda la electricidad mundial. También tiene ejemplos de deforestación. Representa 11 % de las emisiones CO₂. El 90 % de las emisiones se producen como resultado de la expansión de cultivos y ganadería. Si esto se incrementa a 260 000 millones de dólares anuales, entonces las emisiones de la agroindustria podrían reducirse a la mitad en 2030. Los beneficios serían inmensos. Incluso 4,3 billones de dólares en la próxima década, 16 dólares por cada dólar invertido. Para una inversión que genera beneficios económicos, medioambientales y sanitarios. Así que hay beneficios económicos, incluso cuando hay retos también. Y para hablar de esto tenemos el panel compuesto por Rania Al-Mashat, ministra de Cooperación, Internacional y Planificación de la República Árabe de Egipto. Y también tenemos a la ministra Simone Tebet, ministra de Planificación y Presupuesto de Brasil. Y, para recordarles, la Ministra va a disponer de servicios de interpretación para poderla escuchar. Y vamos a pasar en lo que se ha hablado esta mañana y vamos a entrar más en detalle. Ministra Tebet, lo que ha visto Brasil refleja el dilema de otras economías emergentes en el mundo, el encontrar ese equilibrio entre el desarrollo económico y el crecimiento con la sostenibilidad medioambiental, en particular debido a los esfuerzos emprendidos por Brasil para preservar el Amazonas. ¿Cómo puede encontrar ese equilibrio para encontrar la solución idónea?
[Simone Tebet] Buenos días, un placer conocerle. Mi servicio de interpretación no funciona, pero voy a responder a su pregunta. Es muy importante recordar que Brasil está en el centro de atención ahora. Estamos presidiendo la G20, la COP 30 el año que viene y también el encuentro de los BRICS. Mi ministerio tiene una gran misión, el Ministerio de Planificación. En Brasil, hicimos un estudio de norte a sur. Hicimos una pregunta muy sencilla para un planeamiento 2024 a 2027. “¿Qué Brasil quieren para los próximos cuatro años?” Y la respuesta fue en cinco puntos transversales mencionados por el pueblo brasileño. Género, crianza y adolescencia, el tema de raza, los pueblos originarios y el tema de la sustentabilidad. En la plataforma digital, el programa más votado fue qué es lo que va a hacer Brasil en cuanto a transición energética y cambio climático. Eso incluido en la planificación de los 88 programas, grandes programas presupuestarios. Más de 50 se concentran en el tema de sostenibilidad. Así que también aprobamos proyectos para estados y municipios de Brasil. Así que tenemos también indicadores verdes para aprobar los proyectos que tienen que ver con el tema de la sostenibilidad. Otra cosa que merece la pena decir es que el BID y el Grupo Banco Mundial están de manera conjunta desarrollando los programas Amazonia Viva y Amazonia siempre. Mañana anunciaremos algo para poder fomentar el desarrollo en los estados de la región amazónica. El Ministro ha de estar ahora mismo anunciando la plataforma digital de nuestra política de transición ecológica. También, de manera inédita, junto con los tres poderes de Brasil, firmaron un compromiso, un compromiso para con una política de transición ecológica, transformación ecológica para tener finanzas sostenibles, proyectos de bioeconomía, de economía circular e infraestructura verde. Por eso tenemos conciencia de la responsabilidad que tenemos. Nos sentimos muy optimistas sobre cómo vamos a avanzar en este tema.
[Rajini Vaidyanathan] Muchas gracias. Ahora voy a traer a la ministra Al-Mashat a la conversación. El comienzo de la conversación esta mañana, escuchamos de Ndidi y Anne. Ellas hablaron de cómo los alimentos tienen que ser una prioridad en la agenda climática. Usted ha sido la anfitriona de una COP en Sharm el-Sheij. Los alimentos forman parte de la agenda de COP, pero ¿cómo se prioriza? ¿Cómo se pone como prioridad máxima?
[Rania Al-Mashat] Muchísimas gracias. La mitigación siempre ha estado en primera en línea en las conversaciones sobre cambio climático. La transición energética ha sido priorizada en las conversaciones. Cuando nosotros fuimos anfitriones de la COP 27, quisimos presionar más por el tema de la adaptación y resiliencia. Cuando hablamos de adaptación, hablamos de sistemas alimentarios y sistemas hídricos; están relacionados. Entonces, seguridad alimentaria, seguridad hídrica. Y yo creo que definitivamente esto ha avanzado, especialmente cuando vemos alianzas como la que acaba de mencionar la Ministra, lo que está ocurriendo con el G20. En nuestro caso también estaba el tema del fondo de pérdidas y daños que tiene en cuenta el tema de la erosión de tierras en África y en otras naciones también. Así que no es que no esté como prioridad en la agenda, pero se ha avanzado bastante el aumento de los precios de los alimentos a nivel mundial, la importancia de intentar garantizar esa seguridad alimentaria y que las personas tengan acceso a alimentos a precios asequibles. Esto es una prioridad para la institución de inversiones mundiales, así como para los países. La idea es ver cómo podemos hacer esto de manera mancomunada y de una manera que sea lo más barata posible cuando se trata, por ejemplo, de temas de financiamiento, pero en cuanto a transferencias tecnológicas también.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias. Ministra Tebet, espero que ya esté funcionando la interpretación. ¿Has escuchado la conversación sobre intentar asegurar que los alimentos se conviertan en una prioridad en la agenda? Van a ser anfitriones de una Cumbre en breve en Brasil. ¿Qué es lo que van a hacer para que los alimentos sean dicha prioridad y estén en el centro de la conversación?
[Simone Tebet] En julio tuvimos ese prelanzamiento de la Alianza Global para la Lucha contra el Hambre en Río de Janeiro. El presidente Lula reforzó el papel de liderazgo y el compromiso para erradicar el hambre en el mundo. Colocó esto como agenda prioritaria, como política de Estado en Brasil y no como del Gobierno. Yo estoy convencida de que con la cooperación de todos vamos a poder avanzar, inclusive en lo que se refiere a las diferentes experiencias que tenemos ya en otros países. En el caso de Brasil, por ejemplo, en cuanto a políticas concretas, tenemos muchas cosas que presentar. Esto podrían ser alternativas para otros países y viceversa también. Tenemos también la convicción de que hay experiencias con mucho éxito en Egipto, en India, que nosotros podremos aprovechar. Esas soluciones creadas en el sur global van a ser fundamentales. Es decir, tener toda una serie de políticas y que, luego, cada país, dentro de dicho grupo de políticas, podrá escoger lo que satisfaga sus necesidades. Obvio que, sin financiamiento, sin financiamiento sostenible, sin fondos específicos, no vamos a tener las condiciones necesarias para avanzar. Pero es un gran progreso. El G20 ha decidido que su prioridad va a ser un mundo justo y efectivamente sostenible. En el caso de Brasil, voy a dar dos ejemplos. La alimentación escolar gratuita y de calidad, y la agricultura familiar con un subsidio y, obviamente, nuestro programa Bolsa Familia. Aquellos que están por debajo del umbral de la pobreza reciben efectivo. Estamos también preparando a las mujeres, a los trabajadores, para poder tener acceso al mercado laboral.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias, Ministra. Ahora quiero hacerte a ti una pregunta relacionada. La Ministra ha hablado de los beneficios y la manera en la que se puede trabajar con el sector privado, las iniciativas que uno puede aportar. Hemos hablado de ello a lo largo de la mañana, pero me gustaría escuchar su opinión. Ha liderado el nexo de agua, alimento y energía para intentar atraer financiamiento privado. ¿Puedes hablar de esa plataforma? ¿Qué es lo que ha logrado?
[Rania Al-Mashat] Las plataformas de países se están abordando conversaciones que tienen que ver con el clima y el desarrollo. Los países tienen que desarrollar estrategias que promuevan la adaptación, la resiliencia. Y, en nuestro caso tenemos un pilar de agua, uno de alimento. En el pilar de alimento, IFAT, nuestro socio, ha tomado el liderazgo. La idea básicamente son proyectos que estén por todo Egipto. Tenemos el Delta, la parte norte de Egipto y está la relación entre el sistema alimentario y el sistema de irrigación. Una parte clave de intentar fomentar estos proyectos, sobre todo en cuanto al lado tecnológico, es invitando al sector privado. Ellos son los que tienen la tecnología necesaria para avanzar. Así que en esa plataforma nacional se brindan fondos en términos concesionarios para poder atraer inversiones del sector privado a estas iniciativas sumamente importantes en ese sector alimentario y también hídrico. Lo que estamos haciendo con nuestros socios de desarrollo es el diseño en sí del proyecto. Muchas consultas internas con los diferentes ministerios. A veces también la normativa tiene que ser adaptada para luego permitir que se aumente la participación de los socios. Ese es un elemento clave en cuanto a las prioridades. Como ha dicho la Ministra, en el tema de planificación, los proyectos de planificación que se van a implementar, hay que ver el presupuesto asignado para el proyecto. En nuestro caso, el 40 % de la inversión pública tiene que ser verde. Aquí se incluye agricultura, infraestructura, energía, etcétera. Así que estas son todas herramientas que, de nuevo, están intentando abordar los puntos que están también en la plataforma de países.
[Rajini Vaidyanathan] Ministra, hemos escuchado y has mencionado algunos de tus planes, las agendas de los diferentes gobiernos, lo que pueden aportar a la hora de trabajar con el sector privado. Pero esto nos lleva de nuevo a lo que el presidente ha mencionado al comienzo de esta conversación, y es cómo se empodera a los pequeños agricultores en el terreno para crecer y unirse a cooperativas de agricultores.
[Simone Tebet] Esta pregunta es fundamental, especialmente en mi país. Un dato conocido por todos en Brasil es que más del 70 % de los productos básicos que comemos, especialmente alubias, hortalizas, verduras, algunos frijoles no vienen de los grandes latifundios, sino de la agricultura familiar. Esto es fundamental para el diagnóstico de la base. A partir de ahí, tenemos que tener políticas diferenciadas con diferentes tarifas para que el pequeño agricultor pueda producir y ese producto no falte en las estanterías de los supermercados y no llegue con un alto precio a la mesa del trabajador en Brasil o del mundo. El Brasil tiene conciencia de que no se está alimentando solo a ellos mismos. Alimentamos a cuatro Brasiles, 400 millones de personas en el planeta. Tenemos las condiciones para no derrumbar ni un solo árbol más. Es decir, vamos a llegar a mil millones de personas alimentadas por Brasil sin aumentar la deforestación, si se han implementado diferentes medidas. Entonces, aquí tenemos que ver cómo los bancos de desarrollo pueden ayudar. Ya están ayudando con sus conocimientos, ayudando en la elaboración de proyectos, proyectos más eficientes, pero también ahora con colaboraciones financieras. Aquí me gustaría subrayar que va a ser fundamental en esta política de transición ecológica que las finanzas sostenibles, los bancos en desarrollo, el Grupo Banco Mundial, entre otros, puedan ser socios de Brasil, del sur global y de los países en desarrollo en general.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias por esas palabras, ministra Tebet. Ahora, ministra Al-Mashat, le voy a hacer a usted la última pregunta. Hemos hablado del empoderamiento de los agricultores en el terreno, en el campo. Hemos hablado también de la situación en India anteriormente, pero me gustaría saber su opinión. La situación en Egipto. ¿Cómo uno hace a las mujeres partícipe de esta conversación?
[Rania Al-Mashat] Podemos ver, en nuestro caso, diferentes situaciones. Por ejemplo, las parcelas que tienen los pequeños agricultores a través de programas de alimentos u otros se enfocan en cómo diseñar todo esto para ellos, para que pasen, por ejemplo, de utilizar diésel a paneles solares para irrigación en estas pequeñas parcelas. Y, luego, también, el tema de la resistencia a las cosechas. Hay programas específicos en diferentes áreas del país para ello. Las mujeres definitivamente forman parte de esta ecuación. No quiero decir la palabra “ecuación”, pero igual del enfoque de estos programas también. Por ejemplo, cuando miramos algunos de los proyectos que tenemos con USAID, entre otros, se enfocan en las mujeres que cultivan ciertos productos como insumos de la cadena de valor. Por ejemplo, patatas o papas, que una de las grandes compañías, ellas son las que las producen y luego el sector privado compra las papas y al tener estas cadenas de suministro que identifica a las mujeres y que las trae a la cadena de suministro, hay que hacerlo de manera consciente. Y, luego, también, cuando funciona bien, así se abre la puerta a más casos. Así que tenemos programas muy importantes que se pueden ampliar y que se pueden utilizar en otros países.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias a las dos. Desgraciadamente, nos hemos quedado sin tiempo, Pero, de nuevo, ha sido una conversación sumamente interesante, escuchar lo que tenían que decir de primera mano. Qué es lo que están haciendo en el terreno, cuáles son sus de nuestras prioridades.
[Rajini Vaidyanathan] Muchísimas gracias. [Aplausos]
[Rajini Vaidyanathan] Bueno, lastimosamente, nos quedamos sin tiempo para hoy, pero creo que hablo por todos porque ha sido muy fascinante, unos mensajes muy interesantes. Hemos hablado cómo el alimento de la agricultura es un motor para el impulso económico, cómo los agricultores tienen que ser empoderados en los campos, incluyendo las mujeres. También hemos visto cómo el Gobierno y el sector privado pueden colaborar y la importancia de hacerlo todo, al igual que buscar esa prioridad a producir alimentos saludables y nutritivos, haciendo frente a los retos de cambio climático. Quisiera agradecerles a todos los panelistas, que pueden escuchar sus aplausos. Algunos se han desplazado desde distintos rincones del mundo. Agradecerles a todos quienes nos han seguido en línea y los que se han quedado con nosotros en la sala pueden ver la grabación de este vídeo y compartirlo con sus amigos en envivo.bancomundial.org y pueden continuar compartiendo sus opiniones con la etiqueta #WBGMeetings. Gracias. [Música]